Junto a Dylan Catriel Blanco y Mía Villanueva, ambos de 18 años de edad, y un menor de 15 años; ya son tres las personas que están involucradas en la brutal agresión que sufrió Lautaro Maximiliano Ortigoza, quien sigue internado, en cuidados intensivos, con pronostico de salud reservado.
Blanco y Villanueva quedaron formalmente imputados en orden al delito de homicidio en grado de tentativa, agravado por el vínculo, por alevosía y por la participación de tres o más personas. Estos dos imputados se negaron a declarar en indagatoria.
El fiscal a cargo de la causa, Jorge López Oribe, consideró que el ataque a Lautaro Maximiliano Ortigoza fue planeado, para lo cual, Mía Villanueva se valió de la cuenta personal que el menor de 15 años de edad tiene en las redes sociales, para citar a Ortigoza hasta el ex frigorífico CAP.
El fiscal señaló que tanto Blanco como Villanueva tiene participación directa en la agresión física que le propinaron a la víctima y, además, entiende que ambos lo golpearon hasta considerar que lo habían matado, por lo que lo dejaron en un descampado de esa zona de la margen sur.
Ortigoza pudo se encontrado a tiempo, con vida, porque la familia fue anoticiada de lo que iba a suceder por algunos amigos del joven. Al llegar al lugar lo encontraron inconsciente y con signos de haber recibido una brutal golpiza en la cabeza y cuello. Presentando, incluso, algunas cortes.
Cuando llegó la Policía, se pudo establecer que Ortigoza aún tenía signos vitales, por lo que fue trasladado de urgencia a la guardia del Hospital Regional Río Grande. Allí fue intervenido quirúrgicamente y luego trasladado a la Unidad de Terapia Intensiva.
La causa judicial recayó en el Juzgado de Instrucción Nº 3, a cargo de la jueza Cecilia Cataldo, quien ordenó realizar pericias en los teléfonos celulares de los imputados y de la víctima, para conocer los mensajes que se fueron intercambiando y tratar de desentrañar cuál fue el móvil que derivo en tan grave agresión.