El buque Aegir se encuentra instalando la plataforma en las costas de Tierra del Fuego, realizó maniobras en Comodoro Rivadavia y retornó a la Cuenca Austral.
Fénix avanza a paso firme. El proyecto, que aportará hasta 10 millones de metros cúbicos día desde las costas de Tierra del Fuego, comenzó su cuenta regresiva para que deje de ser un sueño a ser una realidad.
El 20 de diciembre comenzó la instalación de la plataforma de producción tras haberse concretado el traslado transoceánico del jacket -parte inferior de la plataforma- desde Italia hacia Argentina, lo cual inaugura la segunda etapa del proyecto.
Dada la magnitud de la operación, la logística para la movilización de la plataforma de 4.800 toneladas se efectuará en dos instancias: instalación del jacket y del topside, que es la parte superior de la plataforma.
Por este motivo, operarán seis embarcaciones en simultáneo, provistas con sistemas de posicionamiento dinámico que logran mantener posición y rumbo mediante propulsión activa, comandada por un sistema de inteligencia artificial que interpreta datos de satélites y sensores de fuerza externos, tales como la corriente y el viento.
La estructura instalada en mar abierto se fijará al suelo marino mediante el hincado de pilotes y la cementación de estos, garantizándose así la estabilidad de la estructura durante todo su ciclo de vida.
En este marco, la embarcación de construcción de aguas profundas (DCV, por sus siglas en inglés) Aegir, pasó por el radar del Puerto de Comodoro Rivadavia y fue asistida por el buque de carga general EEMS DUNDE.
El Aegir es capaz de ejecutar complejos proyectos de tuberías e infraestructuras en entornos de aguas profundas, pudiendo también llevar a cabo instalaciones de plataformas fijas en aguas de baja profundidad, siendo además el primer buque en utilizar un sistema de carrete portátil que permite ahorrar tiempo en la preparación de las operaciones marítimas.
Otra de las características del buque constructor es que dispone de una gran torre de sujeción de la pluma de 5 toneladas para las maniobras de construcción en aguas profundas.
En líneas generales el buque dispone de una eslora de 210 metros, una manga de 46,2 metros y un calado operacional de 9 a 11 metros. Además, cuenta con posicionamiento dinámico 3 (DP3).
Según informó el portal especializado Más Energía, la embarcación finalizó la primera etapa de la instalación de la plataforma por lo que se desplazó hasta el Puerto de Comodoro para trasbordar algunos equipos y materiales de la primera etapa al buque de carga general EEMS DUNDEE, que es un es un equipo de carga general y navega bajo bandera de los Países Bajos con una eslora de 107 metros y una manga de 16 metros.
De la misma manera, el Aegir recibió otros equipos y materiales desde el EEMS DUNDEE para retornar a Tierra del Fuego donde iniciará la segunda etapa de la obra del proyecto Fénix.
Esta operación de transbordo se realiza a 2 millas náuticas aproximadamente donde hay un calado aproximado de 35 metros, y es visible desde la costa de la Capital Nacional del Petróleo.
Según las proyecciones, Fénix permitirá un ahorro de 10 barcos de gas natural licuado durante el periodo invernal, lo que equivale a un 25% de las importaciones de GNL.
De acuerdo con lo planificado, el proyecto contribuirá al autoabastecimiento energético y al objetivo de convertir a la Argentina en un exportador neto de energía.
Para la primera mitad del 2024 se prevé la conexión final del gasoducto submarino que unirá Fénix y Vega Pléyade, proyectada para realizarse mediante la utilización de equipos especiales y buzos expertos.
Por último, se procederá a la perforación de los tres pozos horizontales que entrarán secuencialmente en producción a partir de noviembre de 2024.