En una llamativa decisión, el juez de Ejecución Manuel López aplicó la probation a un exfuncionario del Poder Judicial, en una por tentativa de estafa por 26 mil dólares. De esta forma no computará antecedentes por el hecho.
A través de la “probation”, el Juez de Ejecución Manuel López le impuso al doctor Juan Carlos Assan la compra de 4 kilos de electrodos para soldar y discos de corte para amoladoras, hasta completar la suma de 1000 pesos, en una llamativa decisión consumada en medio de un escándalo judicial por el comportamiento del exdefensor público, quien además tiene otra denuncia penal por su cuestionado desempeño.
En la resolución judicial al doctor Assan se le aplicaron las reglas de fijar residencia y someterse al cuidado del Patronato y Liberados por el término de un año. Cabe destacar que, en su momento, la querella rechazó en audiencia el ofrecimiento de Assan de reparar el daño cometido, pero el fiscal Eduardo Urquiza dio su consentimiento, por lo que la medida se llevó adelante.
Assan es el defensor público que renunció al cargo en 2017 después de verse involucrado en dos causas penales: por un lado a raíz del intento de estafa con la compra de un terreno en el barrio Bahía Cauquén, y por el otro, por la supuesta aceptación de electrodomésticos como parte de pago por sus servicios que cubría un sueldo estatal.
La “probation” es un mecanismo de suspensión del juicio a prueba; mediante lo cual el procesado se compromete a cumplir con reglas de conductas por un tiempo y tras el plazo vencido se extingue la acción penal y con ello no se le computan antecedentes y, de esta forma, no se lo declara reincidente en caso de afrontar otro proceso judicial, tal como sucede con el doctor Juan Carlos Assan, quien tiene pendiente otra causa.
Según publica en su edición de hoy, El Diario del Fin del Mundo, citando fuentes judiciales se confirma que irá a juicio oral y público en el caso de la aceptación de electrodomésticos por el pago de asistir en la defensa pública de un acusado (conducta impropia y escandalosa por parte de un funcionario judicial que cobra un salario del Estado).
La tentativa de estafa
Respecto a la compra de un predio en Bahía Cauquén, a la empresa Euskal, valuado en 110 mil dólares, Assan pretendió escriturarla a su nombre, a pesar de no haber completado los pagos de todas las cuotas pactadas. La maniobra usada por el exfuncionario judicial fue la de depositar el dinero en una cuenta que estaba cerrada y por lo tanto cada depósito era rechazado y devuelto al pagador.
Usando los tickets de las transferencias realizadas (incluso aquellas que fueron rechazadas), Assan intentó escriturar el terreno a su favor, pero la Escribana que intervino en la operación fue quien advirtió que la empresa Euskal no tenía acreditado el pago de todas las cuotas, denunciando el hecho por estafa.
Ahora bien, la conducta del exdefensor público es más polémica aún, porque hasta decidió hacer una demanda civil contra Euskal, usando los mismos comprobantes de depósito como prueba; lo que fue valorado por la juez María Cristina Barrionuevo como prueba en contra del acusado, pero una decisión de la Cámara de Apelaciones revirtió esa decisión y morigeró la situación procesal de Assan.
Fuente: El Diario del Fin del Mundo
